El técnico del Fútbol Club Barcelona, Pep Guardiola, comentó una vez finalizado el encuentro que enfrentaba a su equipo con el Racing de Santander en la vigesimotercera jornada del campeonato ligero, que si continuaban jugando sin criterio y disciplina no lograrían pasar de cuartos de final de la Champions League. Y después de la primera parte que cuajó el equipo culé, es un milagro que el conjunto español salga vivo de Alemania. Porque el Stuttgart ganó al Barcelona en todas las facetas del encuentro y solo consiguió un empate (1-1), lo que deja la eliminatoria encarrilada para los de Cataluña, que se llevan para casa un buen resultado.
El conjunto de Guadiola salto al terreno de juego con las pilas descargadas, con un Iniesta que no es el pillo que descolocaba a las defensas rivales la pasada campaña, un Messi que no logró desbordar en los noventa minutos y un Xavi que nos descubrió que también puede perder balones en la medular. Sin embargo, el Stuttgart salió al campo enchufado, con un Cacau que demostró al mejor equipo de Europa su morro, descaro y buen fútbol. Él marcó de cabeza en el minutos 23 gracias a un centro medido del incansable lateral derecho Osorio. Ibrahimovic igualó el encuentro en la reanudación de la segunda parte gracias a un pase de Pique, que se apoyó en el central germano antes de ceder el gol al sueco. Los alemanes reclamaron dos penaltis más en la primera parte que el árbitro holandés no pitó como pena máxima.
La eliminatoria queda abierta. El Camp Nou recibirá a su equipo en dos semanas dispuestos a dar la vuelta a la eliminatoria y estar en el próximo sorteo de los cuartos de final. Después del tropiezo del Real Madrid en Lyon y del resbalón del Barca en Stuttgart, el Sevilla tendrá que abordar a bajo cero al CSK de Moscú, en un estadio donde el general invierno dispara balas invisibles.
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